Seleccionar página

¡Qué gran importancia tienen los masajes faciales! como es este caso: el masaje Kobido. Un tratamiento manual y natural, de origen japonés, enfocado al rejuvenecimiento facial. Aportando belleza a la piel, salud y luminosidad. Y una profunda sensación de paz y amor.

 

Confío en que las cosas llegan a ti si están en tu camino. Este masaje llegó a mi vida. Me buscó. Tengo raíces orientales de otras vidas pasadas y una afinidad profunda por los valores humanos de la cultura tradicional japonesa que, inevitablemente, atrajo lo que resonaba ya dentro de mí. Todo comenzó con un deseo de recibir yo este masaje para mejorar mi piel y evitar el envejecimiento de ésta. Y la vida lo que decía era: “tienes que darlo tú”. Y así fue. Desde el primer masaje puse mi energía e intención en “recordar” la esencia de este masaje, desde la técnica precisa hasta el estado interior que tenía que tener al darlo. Durante todos los masajes mi fin era pulirme en cuanto a mejorar la técnica ancestral y en procurar amor hacia la persona que lo recibe desde esa conciencia oriental. Conectando con la veneración y respeto al ser humano y con el amor del acto sagrado que es.

Para ello,  es importante dar con un profesional de confianza que realice la  técnica manual precisa con verdadera devoción. Devoción, porque el masaje Kobido es una veneración a la persona que lo recibe, un acto sagrado que trata a cada persona con amor y total entrega.

Este masaje, se ha de realizar con devoción y amor y con la técnica correcta. Sino, no es Kobido.

¿Que relevancia tiene este masaje facial?

Este masaje, como otros, deberían ser un hábito. Una obligación, incluso. Tal y como hacer deporte y comer saludable va siendo cada vez más un hábito en nuestra vida, así también deberíamos ejercitar, elevar y mantener tersos otros músculos de nuestro cuerpo: los de nuestro rostro.  Somos un TODO y es recomendable un hábito holístico, que incluya Todo lo que somos..

Debemos ejercitar los músculos de nuestra cara para tener unos pómulos elevados, unos párpados mejor posicionados o un cuello más terso y firme. El masaje facial Kobido nos proporciona estos objetivos.

Los masajes faciales no deberían concebirse como un lujo que sólo en ocasiones nos podemos ofrecer o que nos puedan regalar o regalarnos en puntuales momentos. Hemos de dar más importancia a los masajes. Son un oasis de paz, belleza y mimo necesario.

La paz que sientes dentro se refleja en tu rostro.

 

Beneficios de un correcto masaje facial

Su objetivo principal es ir retrasando el proceso de envejecimiento de la piel de nuestro rostro, prevenir su deterioro por el paso del tiempo, del estrés, tóxicos y alimentación no saludable.  

Recobrar  la frescura y belleza de nuestras facciones naturales con la luminosidad y brillo de nuestro rostro cuando por dentro estás en paz y equilibrio.

Entre sus amplios beneficios, destaco:

  • Activa la circulación de la sangre, así los nutrientes y el oxígeno llegan a donde son necesarios con más velocidad de lo habitual
  • Se mueven los desechos o toxicidades que acumulamos y su eliminación más rápida a través del sistema linfático.
  • Mejora y atenúa las manchas de la piel
  • Reduce inflamaciones
  • Alivia e incluso desaparece el estrés mental y emocional
  • Relaja y descontractura músculos faciales y mandíbula
  • Atenúa los efectos nocivos de la mandíbula en tensión (bruxismo)
  • Eleva y da firmeza a los músculos de la piel, aportando más tersura a cuello, pómulos, párpados.
  • Vitaliza la piel
  • Reduce arrugas
  • Eleva pómulos
  • Proporciona tersura en barbilla (“papada”)
  • Previene los efectos nocivos del estrés en nuestro rostro
  • Alarga en el tiempo y hace más suaves y bellos los síntomas del paso del tiempo en nuestra cara y cuello.
  • Da luminosidad a nuestro rostro y aspecto saludable
  • Calma la mente
  • RELAJA

Los masajes deben relajar, aportar vitalidad y paz interior.

Fases del masaje kobido:

  • Estiramientos piernas – glúteos – espalda – cuello
  • Shiatsu y amasamientos cuello
  • Limpieza facial con agua micelar natural y energizada
  • Manipulación y técnicas manuales en rostro, cuello y pecho
  • Shiatsu (acupuntura manual craneal-facial)
  • Drenaje linfático manual
  • Equilibrio mental, emocional/espiritual
  • Desaflojo piernas y digito-presiones en palma de los pies

 

¿Cuál es su origen?

Según la tradición japonesa, la belleza exterior se consigue de forma natural armonizando nuestro físico, nuestra mente y nuestra espiritualidad. En la cultura japonesa, el rostro refleja nuestra energía vital, o Ki.

Los problemas faciales, según la tradición japonesa, revelan una desarmonización de nuestra energía vital.

Se cree que el verdadero origen del masaje Kobido fue entre los guerreros de Japón y sus batallas. Éstos, se daban masajes en el rostro para calmar su mente y para potenciar su fuerza interior. Aunque es más conocida la historia de la emperatriz que observó la luminosidad en la piel de los guerreros y se hizo eco de que este particular masaje calmaba los dolores de cabeza.  La emperatriz se llevó esta maravillosa técnica a la casa imperial y a partir de entonces se puso de moda entre los miembros de la realeza. Aunque esta historia no está del todo comprobada, el kobido sigue siendo hoy día más conocido como  “el masaje de las emperatrices” que “el de los guerreros de Japón”.

 

A quién va dirigido:

A cualquier persona, hombre o mujer que quieran incidir en el paso de la edad sobre la piel de nuestro rostro. A quienes deseen reducir sus arrugas de forma natural, obtener más luminosidad y flexibilidad en su piel. A quienes busquen un placentero relax mental que incida directamente en su belleza facial. A aquellos que necesiten regenerar su piel, atenuar manchas y expresiones faciales. A quienes quieran mejorar el aspecto de su cuello y papada.

Ideal para quienes desean quitarse unos años sin recurrir al bisturí, sin técnicas invasivas para alisar sus arrugas y dar brillo a su piel desgastada por el paso del tiempo, la contaminación, los rayos ultravioleta, el tabaco o sustancias tóxicas.

Para quienes quieran reducir el estrés, es maravilloso comprobar como este masaje tiene un increíble efecto sobre el ánimo de las personas. Muchas personas no lo utilizan únicamente por su apariencia, sino por su efecto calmante, que les hace olvidar el estrés.

 

Sirve para:

El masaje facial Kobido tiene como propósito el reequilibrio fisiológico de la salud a través del masaje facial y el rejuvenecimiento y retorno de nuestra belleza natural.

 

Recomendaciones:

Se recomienda traer ropa cómoda, sobre todo pantalón elástico tipo leggins o de deporte, para poder realizar los estiramientos lo más confortables posible.

Es un masaje de 1 hora y cuarto de duración.

Se da en camilla, boca arriba. Con cuello y parte del pectoral descubierto. La manipulación manual sobre el rostro y cuello se realiza con aceites especiales. Estas manipulaciones no son suaves, sino profundas, pero la sensación es muy satisfactoria y relajante. Los movimientos se van adaptando a la fisonomía de cada persona. Es un masaje con protocolo pero que se adapta a cada persona según sus formas corporales.

En casos de acné, no se recomienda la parte de la manipulación, que se activa mucho la circulación. Se procedería a estiramientos y shiatsu. En cuanto la piel mejore, se puede ir incorporando las fricciones manuales en el rostro.

 
 
 
 
 

Libérate de todo lo que no es tuyo.

Si realizas este test gratuito, puedo saber qué tratamiento es el mejor que se adapta a ti en estos momentos

Test para personas

Test para dueños de mascotas